sábado, 21 de junio de 2014




LA WERKA LOCA

“Ruega por nosotros santa madre de Dios”… se oía quedito a lo lejos del pasillo; casi en el fondo. Con el cuerpo cansado Miguel caminaba lentamente sin rumbo fijo, cargaba su pesada guitarra,
-las serenatas nocturnas son cada vez más escasas- decía Miguel para sus adentros, en eso un escalofrío le recorrió el cuerpo, los gemidos de la mujer le parecían aterradores, rechinaban las puertas y en medio del intenso calor una ola de aire helado le hizo estremecerse, escuchó palabras en latín antiguo, luego pequeños balbuceos en náhuatl, vio salir corriendo de un cuarto a otro el cuerpo inerte de una pequeña mujer, se le puso de frente, Miguel sintió morir, hubiese preferido la muerte a experimentar esa extraña sensación de escalofrío , ahí estaba parada viéndolo a los ojos, tenía una mirada intensa, triste pero diabólica a la vez, sintió un duro golpe en la cabeza, cuando abrió los ojos estaba tirado en el piso, tenía la cara y los brazos arañados; sudaba frío, junto a el estaba Mauricio que había entrado para buscar un mariachi y llevarle serenata a su mujer, encontró a Miguel desmayado, al despertarlo Miguel le contó todos los detalles de la horrible aparición , el buen Mauricio que es caricaturista de profesión hizo a bien dibujar un retrato de aquel ser que Miguel había visto, una vez que terminó de dibujarla sintió en el cuerpo una extraña picazón y un airecito le pasó por la nuca, recordó que su abuela le había mostrado una vez esa misma imagen , muchos años atrás vivió en ese vecindario una extraña jovencita; la llamaban la werka loca, la pobre niña mató a su perro y se lo comió en pedacitos, su madre la amarró a la pata de la cama y la abandonó porque no supo qué hacer con ella, la gente le daba comida por la ventana de la puerta, ahí murió desolada una noche de terrible calor . Desde entonces cada que hace calor intenso en la ciudad dicen que la werka loca sale para que le quites los amarres que trae en los pies…
¡¡¡ -me desatas por favor… !!!